Café es una obra que habla sobre las adicciones y la prohibición, y sobre las consecuencias que generan, que van desde la tolerancia hasta la represión. En Café acompañaremos a unos personajes que ven alteradas sus vidas debido a una circunstancia excepcional, la ilegalización del café.

En esta obra, la protagonista, Amanda, verá cómo este hecho la afecta personalmente, de un modo directo, y cómo los efectos de la prohibición van alterando, como si de una onda expansiva se tratara, a su vida familiar y laboral. En este nuevo contexto, Amanda iniciará el descubrimiento de un submundo cuya existencia ignoraba.

La adicción, la represión, la tolerancia, el respeto y la lucha por la libertad de decisión, la extorsión y el chantaje, la delincuencia o la sumisión son conductas que toman forma en los personajes que rodean a Amanda y en ella misma, y que la conducen a situaciones disparatadas detrás de las cuales se sugieren realidades que están a la vuelta de la esquina.

Café plantea una reflexión sobre de la capacidad del individuo para ejercer la libertad, para decidir sobre el propio cuerpo, para convivir con la imposición de normas en nombre de intereses económicos y del control social.

La obra aborda también la hipocresía, la contradicción en la que incurren el Estado y una sociedad que prohiben y marginan, que restringen libertades para resolver los problemas que su propio funcionamiento genera y que plantean soluciones que agravan los conflictos que pretenden resolver.