NI PALABRA
El país está gobernado por un dictador, Cerato Simple. Una de sus mayores obsesiones es reducir el vocabulario a su máxima expresión. Alega que la gente pierde el tiempo intentando conocer el significado de las palabras; pierde el tiempo intentando encontrar las palabras que más se ajusten a lo que quiere nombrar; pierde tiempo jugando con ellas y su musicalidad; hasta pierde tiempo creando y cantando rimas y poemas. Demasiado tiempo, demasiadas palabras.